México es escenario de hechos alarmantes que exponen el creciente reclutamiento de de niñas, niños y adolescentes con fines criminales.
La detención de un “niño sicario” de 14 años en Tabasco, la implicación de jóvenes en secuestros en Iztapalapa y el asesinato del alcalde de Uruapan, Carlos Manzo revelan una crisis que hay con los jóvenes. Expertos de Reinserta indican que esto es un reflejo de un país fracturado por la violencia estructural, la desigualdad y el abandono institucional.
TAMBIÉN LEE: EE.UU. advierte a turistas de violencia terrorista en México
Un llamado urgente desde Reinserta contra el reclutamiento infantil
Ante este panorama, la organización presentó el libro ¿Cómo no ser un sicario?, desarrollado en colaboración con Grey México. La presentación se realizó como parte del Segundo Día Internacional para la Prevención y la Lucha contra todas las Formas de Delincuencia Organizada Transnacional. El texto busca poner en el centro del debate qué pasa con los niños y jóvenes, así como cuestionar la normalización de esta tragedia social.
Durante la presentación, Saskia Niño de Rivera, cofundadora de Reinserta, advirtió que las y los menores se incorporan a las filas del crimen organizado por carencias estructurales. “El sistema está roto y en deuda”, afirmó, subrayando la urgencia de crear entornos protectores que ofrezcan alternativas reales a quienes crecen en contextos donde el delito se presenta como la única salida.
TAMBIÉN LEE: EEUU ofrece ayuda a México tras asesinato de Carlos Manzo
El investigador Rodrigo Peña destacó que la propuesta del libro es una “acción de red”. Recordó que la construcción de paz debe operar del mismo modo que lo hace la delincuencia.
Reinserta sostiene que enfrentar el reclutamiento infantil exige una respuesta coordinada entre Estado, sociedad civil, escuelas, comunidades y familias, capaz de contrarrestar las redes criminales con redes de cuidado y prevención.
El testimonio de Rolando, sobreviviente de las filas de la delincuencia, recordó que cada cifra representa una vida que pudo cambiar de rumbo, un niño que pudo ser salvado y una sociedad que debió actuar antes.
Colaboración, atención y atención de las carencias
Reinserta enfatizó que el reclutamiento de menores no puede verse como casos aislados. Indicó que es la consecuencia de la violencia institucional y estructural que persiste en el país. Mientras la pobreza, la deserción escolar, la falta de oportunidades y la ausencia de espacios seguros no se atiendan, México fallará a quienes más deberían estar protegidos.
La organización reiteró su exigencia de tipificar el reclutamiento infantil como delito autónomo. Insistió en la implementación de programas estatales de prevención adaptados a cada contexto local.
“Cada niña y niño reclutado representa un fracaso colectivo, pero cada acción de prevención es una posibilidad de reconstruir el tejido social”, subrayaron.
El libro ¿Cómo no ser un sicario? es un punto de partida para transformar la conciencia en acción y devolver la esperanza a una generación atrapada por la violencia.
