Diego Borella, asistente de dirección y creador multifacético, murió el jueves 21 de agosto durante el rodaje de la quinta temporada de Emily in Paris. El cineasta de 47 años se desplomó en el Hotel Danieli mientras coordinaba una secuencia nocturna.
Los médicos que participaban en la producción intentaron auxiliarlo de inmediato. A pesar del uso de un desfibrilador y la llegada de los servicios de emergencia, no lograron salvarle la vida. A las 7:30 p. m. confirmaron el deceso. Autoridades italianas señalaron que un infarto pudo ser la causa del desenlace.
Emily in Paris: Reacciones tras la pérdida
El fallecimiento de Borella conmocionó al equipo de la serie, que interrumpió de inmediato la filmación. Netflix anunció una pausa indefinida en las grabaciones, que habían comenzado en Venecia el 15 de agosto. El concejal de Turismo de la ciudad, Simone Venturini, lamentó la pérdida y reconoció la huella cultural que Borella dejó en la escena artística italiana.
Lily Collins, protagonista de la serie, se unió al duelo junto con actores y personal técnico, quienes dedicaron unas palabras privadas a su compañero.
Una trayectoria más allá de la televisión
Borella no solo participó en cine y televisión. Su formación académica en Roma, Londres y Nueva York le permitió explorar distintas disciplinas. Se dedicó también a la literatura y las artes visuales, escribiendo poesía, haikus, cuentos infantiles y obras de teatro.
Su muerte no solo detuvo el rodaje de una de las producciones más vistas de Netflix, también dejó un vacío en la comunidad cultural de Venecia. La quinta temporada de Emily in Paris, programada para estrenarse el 18 de diciembre, se encuentra ahora bajo incertidumbre, con gran parte de sus escenas ambientadas en Roma y Venecia.
