La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, y su homólogo estadounidense, Donald Trump, sostuvieron este martes una llamada telefónica en la que acordaron una prórroga de 90 días antes de que entren en vigor los aranceles del 30%.
Este acuerdo representa un nuevo avance en las negociaciones bilaterales impulsadas por el gobierno mexicano desde el inicio del nuevo mandato del empresario.
A través de sus redes sociales, Trump calificó la conversación con Sheinbaum como “muy fructífera” y confirmó que ambos gobiernos seguirán dialogando para alcanzar un nuevo tratado comercial dentro del plazo acordado.
Durante ese tiempo, México buscará evitar la imposición de aranceles más agresivos y defender sus exportaciones estratégicas.
Sin embargo, el mandatario estadounidense aclaró que algunos gravámenes seguirán aplicándose, incluyendo un 25% al fentanilo, 25% a los automóviles y 50% a productos como el acero, aluminio y cobre.
Para evitar los aranceles, aseguró que México se comprometió a eliminar barreras comerciales no arancelarias de manera inmediata.
Trump justificó el enfoque diferenciado hacia México al señalar que “las complejidades de un acuerdo con México son distintas debido a la frontera compartida, los desafíos migratorios y el narcotráfico”.
Durante la llamada, Sheinbaum estuvo acompañada por su equipo económico y diplomático, incluyendo a Marcelo Ebrard, secretario de Economía, y Juan Ramón de la Fuente, titular de Relaciones Exteriores.
La presidenta sostuvo que este nuevo plazo les dará la oportunidad para construir un acuerdo de largo plazo a partir del diálogo.