Seis mexicanos liberados tras incidente de la Flotilla Global Sumud. La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) confirmó el 7 de octubre de 2025 que inició la repatriación de los connacionales que fueron detenidos mientras participaban en la misión humanitaria hacia Gaza. Tras ser trasladados desde Israel, el grupo llegó a Amán, Jordania, donde autoridades diplomáticas mexicanas coordinaron su retorno seguro hacia la Ciudad de México.
La SRE señaló que la liberación se logró gracias a la coordinación con los gobiernos de Israel y Jordania, con el objetivo de asegurar la integridad física de los ciudadanos y garantizar un regreso sin contratiempos. La operación incluyó seguimiento permanente de los familiares y apoyo logístico en cada etapa del traslado.

Identidad de los liberados y acompañamiento diplomático
Los mexicanos liberados son Sol González Eguía, Ernesto Ledesma Arronte, Arlín Medrano Guzmán, Carlos Pérez Osorio, Diego Vázquez Galindo y Laura Alejandra Vélez Ruiz Gaitán. En Amán, fueron recibidos por el embajador de México en Jordania y acompañados por el representante diplomático mexicano en Israel durante el trayecto hacia México.
La SRE agradeció el apoyo del gobierno jordano para facilitar permisos y garantizar un tránsito seguro. La dependencia destacó que la prioridad del Gobierno de México es proteger a sus ciudadanos en cualquier situación de riesgo en el extranjero.
Además de los seis mexicanos, Jordania recibió a 131 activistas internacionales que viajaban en la Global Sumud Flotilla, incluyendo ciudadanos de América Latina y Europa. Todos fueron evacuados desde Israel y trasladados por el Puente Rey Husein, que conecta Jordania con Cisjordania.

Contexto de la misión humanitaria
La Global Sumud Flotilla consistió en varias embarcaciones civiles que buscaban entregar ayuda humanitaria a Gaza y visibilizar las restricciones derivadas del bloqueo israelí. Las autoridades israelíes interceptaron las naves, deteniendo a los activistas bajo el argumento de incumplimiento de normas de seguridad marítima.
México intervino de inmediato mediante canales diplomáticos, buscando información sobre los connacionales y gestionando su liberación sin cargos. La presidenta Claudia Sheinbaum destacó que los seis activistas no habían cometido delito alguno y exigió su entrega inmediata.